La problemática ambiental que
enfrenta el mundo es tan evidente que hace necesario una educación ambiental,
debido a que el uso desmedido de los recursos naturales con fines económicos ha
ocasionado daños irreparables al medio ambiente. Como lo afirma, Vélez, M. F.
A., & Rodríguez-Borges, C. G. (2021):
“El modelo de desarrollo
convencional que prioriza el crecimiento económico a toda costa, sin tener en
cuenta la capacidad de los sistemas ambientales, ha conducido inevitablemente a
un acelerado deterioro ambiental provocando fenómenos como la pérdida de
biodiversidad, la deforestación, la contaminación, la degradación de los
suelos, el cambio climático, el calentamiento de la atmósfera, etc., los cuales
afectan las condiciones de vida en el planeta, incluyendo la vida humana” (p.
5).
Colombia no es ajena a esta
problemática ambiental. Nuestro país enfrenta actualmente desafíos tales como,
la deforestación, contaminación de ríos, lagos y mares, protección de líderes
ambientalistas, defensa de los páramos, restricción del uso del fracking y el
cuidado de la fauna y flora (García, 2021). Los daños ambientales y la escases
de gran parte de los recursos naturales así lo evidencian. Ejemplo de ello es
la disminución de la biodiversidad, pérdida de manglares, emergencias naturales
y contaminación del agua, aspectos que están afectando gravemente el futuro de
nuestro país (García, 2021).
En la actualidad el
departamento de Córdoba sufre una variedad de problemas de carácter ambiental,
que están ocasionando graves consecuencia a nuestro medio y alterando bienestar
de la población de muchas de sus regiones, debido al mal manejo de los recursos
naturales, el actuar indiscriminado de las personas para con el medio y la
falta de conciencia y equidad al momento interactuar con nuestro entorno. Tres
son los problemas más importantes y que son los que, sin lugar a duda, marcan
grandes pautas en la contaminación del departamento, y ocasionan daños muy
nefastos al ecosistema cordobés y a todos los organismos que hacen parte de este:
La contaminación de los humedales, contaminación por la explotación de
minerales y la contaminación por el mal manejo de los residuos sólidos
(Ricardo, 2013, como se citó en Flórez, 2017)
La Institución Educativa
Augusto Espinosa Valderrama, se encuentra ubicada en el corregimiento de Santa
Clara – Montería. Este corregimiento es de difícil acceso y carece de vías
primarias, así como de servicio público de aseo. Por otra parte, los habitantes
y estudiantes no conocen el valor agregado que tienen los residuos
aprovechables, en este caso, todo lo que no se pueda reusar se desecha. El
desarrollo de las actividades económicas de explotación agropecuaria se realiza
mediante procesos empíricos y de tradición y no se realiza un control en la
emisión de residuos de las excretas de cerdo y ganado lo que ocasiona malos
olores y enfermedades que conllevan al deterioro de las relaciones de
convivencia de los pobladores.
Estas situaciones que permean
tanto a la comunidad educativa como a los pobladores de la región han provocado
que históricamente los residuos generados sean quemados, vertidos en el suelo,
en el lote anexo a la institución o en la quebrada directamente.
Igualmente, la quema no
controlada de residuos altera el aire, por la emisión de gases como el CO2
y compuestos azufrados, que mediante la acción de los vientos y la lluvia
son llevados y depositados en el suelo y en las
fuentes hídricas de la región, afectando así los campos de cultivos, el hábitat
de los pobladores y en general la dinámica de los ecosistemas.
En el entorno escolar no hay
control sobre las fuentes de los residuos, por lo que tampoco se evidencia su
segregación, lo que ubica a este establecimiento educativo como un generador.
De igual manera, los planes de estudios no develan información pertinente que
permita capacitar a los estudiantes y pobladores sobre el manejo de los
residuos. El bajo nivel en educación ambiental es un detonante que genera
desinterés en los estudiantes sobre el cuidado del ambiente, lo que conlleva a
hábitos ambientales inadecuados que trascienden de generación en generación.
Considerando que las
afectaciones ambientales tienen repercusión no solo local sino global, la
inadecuada gestión de los residuos sólidos provoca deterioro del paisaje
natural, manifestado como contaminación de aire, agua y suelo lo que impacta en
la calidad de vida de los pobladores y el deterioro progresivo de los
ecosistemas de la población.
0 comments:
Publicar un comentario